
Desde sus primeros acordes, la melodía envuelve con una atmósfera melancólica pero esperanzadora. La voz de Liam Gallagher transmite una mezcla de consuelo y firmeza, como si hablara directamente a alguien que está atravesando un momento de dolor. Las frases "resiste, aguanta, no tengas miedo" funcionan como un mensaje directo, casi terapéutico, que invita a levantarse cuando todo parece desmoronarse.
La canción no busca negar el sufrimiento, sino reconocerlo y enfrentarlo con valentía. En líneas como "nunca cambiarás lo que ya pasó", se acepta que el pasado es inamovible, pero también se plantea que hay un futuro posible, incluso luminoso, si decidimos seguir adelante. La metáfora de las estrellas que desaparecen, pero que eventualmente se verán, sugiere que, aunque hoy no todo tenga sentido, en algún momento las respuestas llegarán.
El coro, con ese insistente "deja de llorar desconsoladamente", es un abrazo musical. No es una orden fría, sino una súplica cálida para volver a mirar hacia adelante. Oasis, en esta canción, no solo canta, consuela. Y con ello, nos recuerda que incluso en los momentos más oscuros, siempre existe un motivo para no rendirse.
Tema musical incluido en el #expediente 89, del 25.04.2025
Recopilación
El PELADO Investiga
# EXPEDIENTE 89