ESCUCHA EL #EXPEDIENTE Nº 69 | 22.11.2024

UN RELATO DE ASTUCIA Y CONDENA ETERNA

0

La leyenda de Stingy Jack, conocida por varias versiones y matices a lo largo de los años, se inicia en una misteriosa noche de brujas en la que se entrelazan el engaño, la astucia y un pacto con el mismísimo diablo. Jack, un herrero según algunas versiones o un simple ladrón de acuerdo a otras, se encuentra con el demonio en una taberna en una noche de juerga. A pesar de su estado ebrio, logra convencerle de que se convierta en una moneda para pagar su cuenta, este la guarda junto a una cruz de plata en su bolsillo, impidiendo que Satanás recupere su forma original.

Ante esta artimaña, Lucifer se ve obligado a negociar un nuevo trato con Jack. Este implica que lo dejará en libertad a cambio de la promesa de no reclamar su alma durante los próximos 10 años. Una década después, se encuentra nuevamente con el demonio, listo para reclamar lo que le pertenece. Pero el herrero, siempre astuto, solicita un último deseo: una manzana de un árbol cercano. Satanás, creyendo que no tenía nada que perder, se trepa para obtener la fruta. Rápidamente, Jack talla una cruz en el tronco, dejándolo atrapado, exigiéndole que le prometa que nunca se llevará su alma. Nuevamente sin alternativas, acepta las nuevas condiciones. Una vez liberado, cumple su promesa de no volver por su alma.

Tras su muerte Jack, busca la entrada al cielo, pero sus numerosos pecados lo descalifican para ingresar. Cuando intenta encontrar refugio en el infierno, Lucifer se niega a aceptarlo, cumpliendo su promesa anterior de no llevarse su alma. Desesperado y perdido en la oscuridad del inframundo, se queja de que no puede encontrar su camino. El demonio, en un último acto de compasión retorcida, le arroja un carbón encendido para iluminar su camino. El errante la coloca en una calabaza que lleva consigo, impidiendo que se apague con el viento.

Desde ese momento en adelante, su alma deambula por la Tierra como “Jack, el de la linterna”, iluminando el camino en las noches oscuras. En algunas versiones, se utiliza un nabo en referencia a las antiguas tradiciones celtas. Con el paso de los años, la leyenda ha evolucionado y ha dado lugar a variantes y adaptaciones en diferentes culturas y regiones, donde se le representa bajo la figura de un hombre sabio o incluso Dios, que asiste a Jack en su enfrentamiento con Lucifer. En otras, se le niega la entrada al infierno tras su muerte, condenandolo a un peregrinar perenne por el mundo de los vivos.

“Jack, el de la linterna”, en definitiva, es un relato de astucia, engaño y un destino atormentado. A través de sus múltiples versiones y matices, esta leyenda continúa siendo un recordatorio de que las promesas hechas al demonio, incluso con trampas y manipulaciones, pueden llevar a consecuencias inesperadas y eternas.

Recopilación
El PELADO Investiga
# EXPEDIENTE 13

Entradas que pueden interesarte

Sin comentarios