Sin embargo, esta historia está siendo cuestionada por investigadores que sugieren que los crímenes de Báthory fueron probablemente exagerados como parte de una conspiración en su contra. A pesar de la controversia, la leyenda ha perdurado a lo largo del tiempo y ha inspirado películas, obras de teatro, óperas, composiciones musicales, programas de televisión e incluso videojuegos.
La vida de La Condesa Sangrienta estuvo marcada por la violencia y los problemas de salud desde una edad temprana. Sufrió ataques epilépticos, cambios de humor violentos y migrañas dolorosas desde los cuatro o cinco años. Además, presenció una ejecución pública a la edad de seis y a los 13, se comprometió con el conde Francisco Nádasdy, de 18 años, y se casaron dos años después. Su matrimonio la introdujo en el mundo de la tortura y las atrocidades, donde su esposo la instruyó en estos métodos.
Tras la muerte de su cónyuge, se mudó al castillo de Čachtice, en Eslovaquia, donde los relatos de su maldad hacia el personal se propagaron, y las familias locales ocultaban a sus hijas para evitar que sirvieran en su casa. Lo que finalmente llevó a su detención fue la extensión de sus abusos a víctimas de una clase superior, lo que resultó en una investigación en 1610.
A pesar de que fue acusada de asesinar a numerosas mujeres jóvenes, nunca fue condenada formalmente. En cambio, cuatro de sus sirvientes fueron condenados por actos de violencia en sus castillos. Elizabeth Báthory pasó el resto de su vida encarcelada en el castillo y falleció en 1614 a la edad de 54 años.
Recopilación
El PELADO Investiga
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